
Ya pasó, se fue, la furiosa tormenta que azotó mi corazón, ¿se fue?
al menos cesaron ya los rayos y los truenos, las nubes negras parecen disiparse
¡¡ ojalá asi sea !!
Quedaron trozos desparramados de esperanza
se fue la luz que guiaba mi ilusión
pero es mejor así...
no necesito más tormentas en mi vida, necesito el sosiego y la calma del después,
necesito sentir que saldrá el sol, la esperanza es lo único que me sostiene
quedarán las marcas de la furia del viento y los golpes del granizo, pero, al fin, todo volverá a la normalidad ¿ cuál es la normalidad ? ¿ la falta de tempestades o la monótona calma del hastío?
Todo terminó ¿ será mejor, será peor? solo se que no habrá más temor del violento fenómeno, pero tampoco sentiré más la frescura de la lluvia, ni el olor a tierra mojada.
Beatriz
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