Ayer, hoy y cada día apareces en mi mente. En una palabra, un gesto, una frase, una melodía
abro mis ojos y ya estás presente en mi pensamiento
durante el día siempre hay algo que me lleva hasta tí
la noche no es la excepción, es un momento en que pido por ti
estás aquí, aquí en mi corazón y de ese lugar es tan difícil poderte desprender
te veo en mis sueños despierta
te veo en mi imaginación
escucho tu voz, te añoro.
El sentimiento que alguna vez nació entre los dos, no se resigna a morir
no se qué espera, pero . . . espera
una palabra, una señal, una guiñada de alguna estrella, algo que indique que puede esperar
no se que fue este amor en mi vida, no se si fue compañía o error
yo solo se que en el fértil terreno de mi corazón, quedó arraigada la semilla de tu amor
y la esperanza no deja que esa semilla deje de crecer con o sin sol
con o sin agua, allí está, el tiempo es el único que podrá hacer que deje de crecer.
Beatriz
